Temen cierre de jardines infantiles particulares por crisis sanitaria

Sostenedores llaman al Gobierno a la acción para salvar la educación de la primera infancia.

Una dura realidad, más allá del Covid-19, golpea con fuerza a sostenedores de salas cunas y jardines infantiles particulares de todo Chile tras la llegada del virus y hoy muchos ven cómo sus establecimientos están a un paso de desaparecer.

Diario de Valdivia conversó con una sostenedora de una sala cuna y jardín infantil de Valdivia, que dejó de funcionar a mediados de marzo tras la llegada del virus, quien señaló estar enfrentando una dura situación ya que, como era de esperar por la pandemia, perdieron las matrículas de los menores que asistían a su recinto.

Como ella, hay cientos de casos en todo el país, por lo que decidieron unirse desde Valdivia a Puerto Montt, y lo propio están haciendo en otras regiones, a fin de solicitar protección y medidas para paliar la actual crisis que enfrentan y que podrían llevar al cierre definitivo de sus recintos y, con ello, cientos de educadoras sin su fuente laboral.

“Lamentablemente muchas familias han retirado a sus hijos por el natural temor a contagios con el virus, porque han perdido sus trabajos y ya no pueden continuar con las mensualidades por la educación y cuidado de sus hijos. Por otro lado, las empresas que eran parte de nuestros convenios optaron por el bono compensatorio directo a sus trabajadores o se unieron a la Ley de Protección del Empleo y nos dejaron en la más completa indefensión”, manifestó la sostenedora.

Dijo que ya no cuentan con suficientes recursos para cubrir los altos arriendos de los recintos donde funcionan sus jardines y salas cuna, recintos que llevan años volcados a la educación de la primera infancia, pero que señalan haber quedado rezagados de las medidas implementadas por el Gobierno para hacer frente a la crisis.

“Son muchos los niños y niñas de primera infancia que se están quedando sin educación y eso debería ser una prioridad. Si cerramos nuestras puertas por la crisis, no es solo un emprendimiento que se pierde, es también una sala cuna y jardín infantil menos cuando volvamos a la esperada normalidad. Necesitamos un salvavidas porque nos estamos ahogando”, puntualizó.

Finalmente, la sostenedor a agradeció a las familias solidarias y empáticas que siguen con sus mensualidades, ya que actualmente son la única esperanza y apoyo para seguir adelante.